Desde Tel Aviv, Sentimental Mercenaries llega con una propuesta intensa, profunda y absolutamente visceral. Este proyecto, liderado por el baterista y letrista Gil E., es una exploración emocional que se mueve entre el progresivo y el metal extremo. Su primer material, Chapter One, ya está disponible, y nos presenta canciones cargadas de angustia, pérdida y reflexión existencial. the end no solo mantiene esa línea, la profundiza con una atmósfera oscura que te dejará sin aliento.
the end
Esta canción es un grito desesperado frente al abandono. El hablante lírico clama por conexión: “Call me / Call me back / Don’t leave me undressed and exposed”. Es imposible no sentir esa urgencia, ese miedo a quedar atrapado en una soledad interminable. La frase “Don’t speak the evil spell” sugiere que el silencio es tan dañino como una maldición, algo que me pareció poderosamente simbólico.
A medida que avanza la letra, la imagen de una habitación vacía y un “barren-broken window / open to the endless blinding sea” me sumergió en una sensación de pérdida total. Hay una melancolía que se convierte en dolor físico, casi tangible. Lo que más me pegó fue la línea “I know was once me”, con la que se cierra el tema. Es como si el protagonista se mirara desde afuera, disociado, incapaz de reconocerse tras tanta ausencia y desgaste emocional.
La música de Sentimental Mercenaries
Musicalmente, the end se presenta con un sonido crudo, casi abrasivo. Las guitarras afiladas cortan como navajas y la batería, simplemente, no da tregua. La ejecución es precisa, pero no clínica; hay una humanidad rugosa que se siente real. Lo que más me atrapó fue lo visceral de las voces: guturales profundos, desgarradores, que transmiten dolor sin filtros. La atmósfera oscura y opresiva, sumada a los cambios dinámicos del tema, generan una montaña rusa emocional que te sacude y no te suelta. La producción permite que cada elemento respire, pero nunca deja de oprimirte, y eso es precisamente lo que lo hace tan poderoso.
Escucha y sigue su trayectoria
the end es un tema que no se anda con rodeos: va directo al núcleo de la angustia emocional. Sentimental Mercenaries tiene algo importante que decir, y lo hace con brutal honestidad. Síguelos en sus redes sociales, y como siempre, acá te seguiré compartiendo música que te sacude los sentidos.
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Sentimental Mercenaries from Tel Aviv deliver an emotionally crushing track with the end, part of their debut release Chapter One. The project blends progressive rock and extreme metal in a raw, honest exploration of loss and abandonment.
Lyrically, the song pleads for connection in the face of emotional abandonment. Lines like “Call me back / Don’t leave me undressed and exposed” reveal a deep vulnerability. The ending, “I know was once me”, speaks of identity loss. Musically, it’s intense and dark. Razor-sharp guitars, relentless drums, and guttural vocals build a bleak yet captivating atmosphere. It’s dynamic, with shifts that keep the listener on edge.
the end is not just a song—it’s an emotional purge. If you appreciate metal that confronts inner turmoil with honesty and weight, this one is for you.
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