Christmas no es una banda que se ande con rodeos. Desde hace más de una década, han mantenido vivo el espíritu más salvaje del punk con una actitud que escupe en la cara de lo políticamente correcto. Originarios de Europa y con más de 500 shows en 18 países, siguen girando con furia. Su álbum Fear of Romance es prueba de que siguen tan intensos como siempre, y Maggot es un golpe que nos lanzan directo al cráneo.
Maggot
Maggot es una cachetada de dos minutos dedicada a ese tipo de persona que siempre quiere más, aunque ya lo tenga todo. La letra es irónica, cruda y sin filtros. Frases como “I’m a maggot, don’t need respect” dejan claro que esto es una burla directa y sin disimulo. Es brutal la forma en que la canción se burla del exceso con una honestidad grotesca y afilada.
El tema no se queda en el cliché punk del grito sin sentido. Tiene un enfoque social bastante claro: denunciar a los parásitos de cualquier clase, esos que viven del sistema mientras se quejan de todo. Líneas como “no more salad, no more fruits / breaking all the basic rules” son una radiografía sarcástica del autoindulgente moderno.
La música de Christmas
Musicalmente, Maggot es puro veneno punk: guitarras crudas, batería que no da tregua y una voz que ruge con melodía y rabia. La producción no busca brillar, sino sonar sucia y directa, como debe ser. Logran una dinámica clara dentro del caos. La rola no te da respiro, pero tampoco se siente desordenada. Esa vibra garage rock le da un toque más callejero que se agradece. Energía pura, sin edulcorantes.
Escucha y sigue su trayectoria
Maggot es el tipo de rola que necesitas para recordarte que el punk no ha muerto, sólo está más afilado. Christmas sigue demostrando que su sonido es una amenaza viva. Síguelos en sus redes sociales, y como siempre, acá te seguiré compartiendo música que te sacude los sentidos.
Sígueme en:
Christmas is a relentless European punk band that has stayed active for over a decade. Their latest release Maggot, from Fear of Romance, is two minutes of pure punk chaos.
The lyrics are a sarcastic take on self-indulgence and entitlement. Lines like “I’m a maggot, don’t need respect” hit with ironic weight. It’s a punch to the face of freeloaders everywhere. Musically, the track is raw and tight. Gritty guitars, a relentless rhythm, and dynamic, melodic screaming bring the garage punk energy to full power. The production feels intentionally dirty.
Maggot proves Christmas is still dangerous and relevant. Follow them online and stick with me for more music that shakes you up.
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