Desde Berlín y con raíces que cruzan Argentina, Chile y Alemania, BED llega con un track que no pide permiso: heart shaped bed. Parte de su álbum everything hurts, es una mezcla hipnótica de shoegaze, dream pop y sensualidad melancólica. Suena íntimo, casi confesional, como si nos susurraran secretos al oído entre suspiros y niebla.
heart shaped bed
La canción juega con la dualidad entre el deseo y la pérdida, entre el cuerpo y el vacío. La letra navega por el terreno del duelo amoroso con frases como “My life is a lie that sells well”, dejando ver esa contradicción entre la imagen y la verdad emocional. Me gusta cómo la voz andrógina de Nicolás Astorga crea un espacio ambiguo, fluido, donde el yo se fragmenta y reconstruye.
En este tema, el “heart shaped bed” no es símbolo de romanticismo, sino de un refugio roto. Es el lugar donde se duerme con el cuerpo pero se despierta con el alma deshecha. La frase “Bugs in my head” transmite el caos interno con una crudeza poética que cala hondo.
La música de BED
A nivel sonoro, esta rola es una delicia envolvente. Las guitarras atmosféricas se combinan con sintetizadores suaves que le dan esa vibra brumosa y cinemática. El ritmo es pausado, pero con pulsos que se sienten en el pecho. Me atrapó desde el primer segundo.
La producción es refinada: cada capa está colocada con precisión, creando una textura que te abraza. El resultado es oscuro pero seductor, como mirar una tormenta a través de una ventana empañada. Sin duda, se nota la mano de Cybermission en la percusión y los detalles electrónicos que le dan ese aire onírico.
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heart shaped bed es apenas una muestra del mundo que BED está construyendo. Síguelos en sus redes sociales, y como siempre, acá te seguiré compartiendo música que te sacude los sentidos.
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