Alex McCulloch es una de esas voces que no puedes ignorar. Originaria de Scarborough, empezó entre el blues, el soul y el jazz, pero fue el folk el que terminó dándole casa. Su estilo es crudo, confesional y a veces salvajemente honesto. Se dio a conocer por Bourbon and Love Songs (2022) y desde entonces no ha soltado el micrófono ni un segundo. Alex escribe desde las entrañas, canta como si se le fuera la vida y tiene esa vibra de bar con historias intensas y amores rotos. No teme exponerse. Te puede hacer reír y llorar en el mismo verso. Así de potente.
Ahora llega con Alex McCulloch – EP, un trabajo íntimo y redondo que gira en torno a la amistad, el amor, los fantasmas del pasado y la gente que nos marca. Son seis canciones cocinadas a fuego lento desde 2022 hasta 2025. Grabado y producido en Toronto por la misma Alex McCulloch, con la ayuda de Davey White, el EP se siente orgánico, cercano, y aunque hable de pérdidas, también celebra a quienes amamos. Escuchar este material es como leer cartas que no sabías que necesitabas. Y, en lo personal, me encantó su tono relajante e introspectivo, lleno de matices suaves pero también con estallidos de energía vocal.
Imprescindibles en Alex McCulloch – EP
Empty House abre con una nostalgia que corta. La letra es una mezcla de imágenes frías y sentimientos atrapados: «empty house, winter’s day / your mouth is an iceberg and I’m in the way». Alex juega con la voz, suave y brillante, pero no teme pisar el acelerador emocional cuando lo requiere. Me conmovió la fragilidad del estribillo: «I need you to stay, Dave». Todo en esta canción grita “algo se rompió y todavía no sé cómo hablar de eso”.
Gregory es un descanso cálido. Tiene esa guitarra acústica que te abraza y un arreglo gospel que le da hondura. La letra es casi una conversación con referencias a otros artistas: «so says Gregory Alan Isakov», «say good old Melody Beattie». Aquí, Alex se muestra vulnerable pero también esperanzada. Me gustó ese toque de humor sutil, con una mirada irónica hacia la adultez y el fracaso.
Drum Circle es de mis favoritas. El saxofón aparece como si estuviera susurrando secretos. La letra es un poema caótico y hermoso, como un diario de alguien que ama sin red de seguridad: «I can’t feel my feet, but I can hear the drumming beat and the fire». Alex frasea con una seguridad desparpajada, mezclando confesiones con punchlines. Sientes la fiesta, el subidón, la caída. Es un viaje sensorial.
Angel te rompe, pero con elegancia. La voz de Alex aquí te desarma con sus matices. Es profunda, íntima, una súplica disfrazada de canción de amor: «I barely know you and you could break my heart, let me hold you». Hay vulnerabilidad, deseo y una urgencia emocional que me dejó pensando. Me encantó cómo la canción escala, emocionalmente y en arreglos, hasta volverse irresistible.
Producción y Sonido en Alex McCulloch – EP
Este EP suena como una plática de madrugada. No hay artificios, todo se siente honesto. La producción mantiene un equilibrio entre lo acústico y lo atmosférico, dejando espacio para que la voz respire y brille. La mezcla es limpia, pero no pulida en exceso, lo cual ayuda a que se sienta auténtica. Alex no solo canta, también toca guitarra y la armónica. Las colaboraciones suman, especialmente los teclados de Matthew Lawrence y los vientos de Sean McCarthy. Los arreglos están al servicio de las canciones, y eso, se agradece.
Escucha y Sigue su trayectoria
Alex McCulloch – EP es una carta abierta a quienes amamos, incluso cuando ya no están. Es una joya indie folk con corazón, talento y mucho carácter. Dale play y déjate llevar. Síguela en sus redes sociales, y claro, mantente al tanto de mis recomendaciones para no perderte lo mejor de la música.
Sígueme en:
Conoce nuevas propuestas con mis diferentes Playlist en Spotify.
Escucha la señal de Expansión Radial, en TuneIn y Apple Music.
Con una programación musical las 24 hrs, todos los días del año. Expande Tus Sentidos.